lunes, 25 de noviembre de 2013

DOS MIL CINCUENTA


























La vejez te golpea con el derechazo del boxeador
le cedes el asiento y piensas cómo debe de ser
vivir en un cuerpo consumido casi
a las puertas del final
-mejor no pensar, le dices sin embargo
al abuelo intentándole animar
y él se anima, claro-
en un cansancio de muerte infinito
la vejez te da un mazazo
te pone frente al espejo de la realidad
que un día llegará
si también lo hace el dos mil cincuenta
tendré entonces setenta y un años
no son tantos, todavía no
la esperanza de vida se ha dilatado
como los finos surcos que deja la marea en la arena
esas hebras
que tanto se asemejan
a la savia huyendo de los nervios de la hoja.

Al marcharte nos dejarás
escarcha en el corazón.

CABALGAMOS LA LUZ COMO HUECO EN LA PARED




Cabalgamos la luz como hueco en la pared
con los ojos extraviados del olvido
música que sueña con ser pájaro
anidar en la ingravidez del parpadeo
plantamos semillas de plata
en la nube de lluvia para la tierra
imaginemos ese espejo transparente
arteria de sangre verde
bosque sagrado y sacrílego tantas veces
enfundados en la niebla
nos acercamos al día que amanece
entre metales y chimeneas de fábrica apagadas
lugares que no pertenecen a los arrabales ni a la ciudad
escaso delirio que no reclama pupilas de mercurio
incendio remoto-subterráneo-acuático
tejiendo corales con la pestaña más aguda
naufragamos en el trono del túnel
y ese niño que nos observa
sabe
digámoselo a él
que aún falta mucho para llegar
que a la próxima estación le han borrado el nombre
y quizás nos bajemos al final de la línea
sin saber
a dónde hemos ido
a parar.
Nos creemos más fuertes, más raudos y veloces
que el tiempo
antes del amanecer.

jueves, 21 de noviembre de 2013

SERÁ BREVE

Voy a dejarlo todo
voy a dejar de ser
lágrima para tu ojo
beso para tus labios
dejaré de escribir
te hablaré de melodías
tatuaré un globo rojo
en tu piel, a cambio
de no ser nada
para la nada
nada para ser
hiedra escalando
tu pared, el cordel
del globo que se escapa
será breve
bum bum
latido de sangre
lo dejaré todo
a cambio de nada
algo que recordarás
cuando me haya ido.